¿Qué es la odontopediatría? Es una especialidad de la odontología que se dedica a la salud bucodental de los más pequeños. Se extiende desde el momento de la primera dentición hasta la etapa adolescente. Su objetivo es vigilar el estado de los dientes y evitar enfermedades que puedan afectar negativamente al organismo, ya sea durante la infancia o debido a secuelas que se manifiesten en la edad adulta. A continuación, te hablamos de sus ventajas.

Ventajas de la odontopediatría y sus tratamientos

El odontopediatra es el profesional que se encarga de abordar la salud dental y bucal de los niños. Hace seguimiento desde edades tempranas y propone tratamientos adaptados para ellos. Sin duda, él se adapta a las necesidades de los más pequeños. Estas son las ventajas más destacadas de cuidar la salud de los dientes de tus hijos.

Ayuda a prevenir y tratar la caries

La inspección de este profesional ayuda a detectar la caries a tiempo. Existen determinados tratamientos, como la fluorización, que protege a los más pequeños de esta patología. Por supuesto, el odontopediatra se encarga de inculcar en la infancia los hábitos de higiene de una forma divertida y adecuada para su edad. La odontopediatría se encarga también de otros tratamientos, como el de la limpieza bucal infantil o los selladores de surcos y fisuras.

Por supuesto, la caries también se puede tratar en los niños. Recuerda que hay personas que piensan que no deben eliminarse si aparecen en los dientes de leche. Sin embargo, sí que es necesario que un especialista se ocupe de ellas si aparecen en los dientes que aún no son los definitivos. Por eso, los profesionales odontopediátricos pueden realizar tratamientos para evitar que la caries pueda llegar a dañar las encías. Para ello, realizan pulpectomías y obturaciones, para reparar las piezas afectadas.

Previene y corrige problemas de colocación dental

Existen distintos tipos de maloclusiones que pueden abordarse desde la niñez. Así, esta especialidad también se centra en la colocación de la ortodoncia para corregir problemas como la mordida cruzada, el paladar estrecho y otras alteraciones.

El aparato ortodóncico puede utilizarse para guiar a los dientes en su crecimiento. A diferencia de lo que muchas personas piensan, realmente puedes comenzar con el tratamiento a partir de los seis años de edad.

Aplica la psicología

Cualquier tratamiento odontopediátrico es llevado a cabo de forma que los más pequeños no tengan miedo al dentista. Es decir, el profesional hace la consulta agradable y divertida, gracias a la empatía y al trato. Indirectamente, las repercusiones son muy positivas, pues aporta a los más pequeños esa confianza para que vuelvan sin miedo y con una gran sonrisa. Les inculca valores muy positivos de prevención y aplicación de hábitos saludables bucodentales.

Casi nunca es demasiado pronto para empezar a llevar a tu hijo al odontopediatra. Cuanto antes lo vea un especialista en odontopediatría, antes podrás saber si su dentadura se está desarrollando correctamente y si hacen falta tratamientos para corregir alteraciones. Este profesional también orienta al niño sobre los hábitos de aseo bucal para mantener su dentadura en perfectas condiciones durante su desarrollo.