Seguramente, habrás oído hablar de los enjuagues dentales con clorhexidina, frecuentemente utilizados para los problemas de encías, como la gingivitis o la periodontitis. Pero, en realidad, la clorhexidina puede hacer mucho más por tu higiene, ya que se trata de un potente antiséptico que se encuentra en la lista de medicamentos esenciales de la Organización Mundial de la Salud.
¿Qué son los enjuagues dentales con clorhexidina?
La clorhexidina tiene acción bactericida y fungicida, es decir, actúa contra las bacterias y los hongos. Pero, como muchos principios activos, nunca se utiliza sola, sino diluida. Por ejemplo, existen pomadas a base de clorhexidina al 0,5 % para desinfectar heridas. Los cirujanos la utilizan al 4 % para el lavado quirúrgico y al 5 % para desinfectar la piel antes de una cirugía.
En odontología se utiliza como:
- Colutorio: al 0,20 %.
- Enjuague bucal: al 0,12 %.
- Aplicación profesional: al 0,05 %.
En altas concentraciones, la clorhexidina es bactericida, ya que destruye la membrana de las bacterias, y en bajas concentraciones es bacteriostática, es decir, impide el crecimiento microbiano. Ambos usos son interesantes en odontología, ya que impiden la actividad de patógenos que causan la formación de placa, la caries y los problemas de encías que hemos mencionado.
Beneficios del enjuague con clorhexidina
Como ves, gracias a su acción antibacteriana, la clorhexidina puede utilizarse para tratar muchos problemas dentales. Veamos cuáles son:
- Protege la salud bucodental, es decir, sirve para prevenir las enfermedades de los dientes y la boca.
- Trata la gingivitis y la periodontitis.
- Reduce la placa bacteriana, lo que, además de lo anterior, servirá para evitar los dientes amarillos, la acumulación de sarro, etc.
- Evita el mal aliento cuando se debe a la acción de microorganismos en la boca, que es la mayor parte de los casos (si no es así, puedes consultarlo con tu médico, porque podría tratarse de una afección digestiva).
- Se usa en intervenciones quirúrgicas en la boca, como en una extracción dental, colocación de implantes dentales o cirugías periodontales para eliminar el cálculo dentario.
- Es muy útil contra las llagas o aftas porque ayuda a que cicatricen. Basta con usar un enjuague bucal con clorhexidina después del cepillado para notar una mejoría.
- Si hay heridas o molestias en la cavidad bucal, ya sea en lengua, paladar, encías… existen aerosoles con clorhexidina que se aplican directamente sobre la zona afectada.
- Se puede utilizar para lavar prótesis dentales, pero hay que tener en cuenta que, si existe inflamación en los tejidos, puede deberse a que la prótesis está mal adaptada.
¿Cómo se usan los enjuagues con clorhexidina?
Se recomienda hacer estos enjuagues al menos durante 30 minutos después del cepillado, pues la pasta dental tiene un compuesto llamado lauril sulfato de sodio que se ha comprobado que no es compatible con la clorhexidina.
En la mayoría de los casos, es suficiente hacer el enjuague durante más de 30 segundos durante 14 días, ya que su efecto se mantiene durante 12 horas en boca.
Como has leído, los enjuagues con clorhexidina pueden solucionar y prevenir muchos problemas dentales. No obstante, consulta siempre con tu dentista para ver si son la solución más adecuada para ti.