La salud bucodental infantil es muy importante. Muchas veces te despreocupas de los dientes de tus niños, pensando que no necesitan tanta higiene porque conservan los dientes de leche y les están naciendo los definitivos. ¡No te engañes! Precisamente es desde la infancia desde donde necesitas comenzar a cuidar la dentadura de tus hijos. Además de por la necesidad de crear buenos hábitos de higiene bucodental, para que la boca esté sana y porque son personas muy vulnerables, con alto consumo de azúcares, etc.
¿Por qué tienes que cuidar la salud bucodental infantil?
Aunque cada vez la sociedad se conciencia más con la reducción de la ingesta de azúcar a todas las edades, lo cierto es que la dieta infantil suele contener muchos azúcares. Como sabrás, el azúcar es un elemento negativo para la placa dental, facilita la aparición de caries y puede provocar otro tipo de problemas en los dientes. Este es el motivo principal por el que es necesaria la correcta limpieza dental después de cada comida, también cuando se trata de los más pequeños.
Por otra parte, tienes que tener en cuenta que los niños están creciendo y su dentadura también. Por eso, debes vigilar su formación, la caída de piezas y la aparición de los dientes definitivos. Por supuesto, cómo nacen estos. Muchos niños necesitan ortodoncia que se puede realizar desde la infancia para corregir desde el primer momento las malas mordidas. Una sonrisa perfecta puede necesitar tratamientos odontológicos u ortodóncicos que en los dientes de los niños son más fáciles de realizar sin dolor.
¿Cómo incentivar costumbres de higiene dental?
En el caso de que tus niños necesiten ortodoncia, la higiene bucal va a ser completamente necesaria. En caso contrario, podrían tener complicaciones, infecciones y mucho dolor en su boca. Por esta razón, es imprescindible que el niño sepa desde el primer momento que lavarse los dientes después de cada comida es una costumbre que va a tener que conservar toda su vida. En este sentido, educar en la salud bucodental es parte de la responsabilidad que tienes como educador.
Por otra parte, puedes intentar que las costumbres de higiene dental se conviertan en un ritual diario, así como enseñarle a comer alimentos que no dañen tanto su placa dental. Por ejemplo, explícale que el consumo de bebidas azucaradas, pasteles y golosinas es algo esporádico y que no debe hacerlo de manera continua. Enséñale a cepillarse bien cada pieza, en todos los sentidos y a guardar el cepillo de dientes sin humedad. También le puedes enseñar a usar hilo dental para mejorar aún más el cepillado.
En definitiva, la responsabilidad que tienes con la salud bucodental infantil de tus hijos es absoluta desde el primer momento. Hay que limpiarles los dientes siempre y, sobre todo, hacerlos responsables de su propia boca. De esta manera, no se trata solo de que te preocupes por su salud dental, sino de que les enseñes a cuidarse, a mantener una correcta higiene y a contribuir positivamente a su salud, mediante alimentos sanos, saludables y buenos hábitos de limpieza.